Historia de dos reptiles

Conversación extraida de dos reptiles prehistóricos. Para mantener su anonimato les llamaremos T y Rex.

T: Hola, muy buenas.

Rex: Muy buenas, ¿Tienen zapatillas?

T: ¿Qué?

Rex: Nada, era un chiste, no importa. ¿Qué haces?

T: Aquí ando, acechando a esos cuellos.

Rex: ¿Cuáles?

T: Cuellos.

Rex: Dirás cuellilargos.

T: No, no, cuellos. Cuellilargos no me gusta, es como muy vulgar.

Rex: Eres un gafapasta, lo sabes ¿No?

T: Sabes perfectamente que en esta época las dioptrías o los astigmatismos no existen, nuestros ojos se mueven para todos los lados. ¿Quieres venir a cenar a mi casa?

Rex: ¿Te estás insinuando?

T: Eh...no, ¿Cómo puedes decir eso?, ¿Qué insinúas?

Rex: Yo no insinúo nada, me has tirado los tejos. Me has invitado a cenar en tu casa.

T: ¿Qué pasa? dos amigos no pueden cenar a gusto a la luz de esa segunda luna que ha salido hoy.

Rex: ¿Cómo que segunda luna?

T: Si, esa que está justo al otro lado de la que conocemos. Esa de ahí, yo la llamo Big Bang...

Aquí se cortó la conversación. Nadie sabe lo que ocurrió verdaderamente pero se sospecha de un meteorito gigante que atacó la tierra y se suicidó tras el ataque. Todos los partidos políticos, que fue lo único que sobrevivió a esa catastrofe que destryó la tierra, pidieron responsabilidades al gobierno y exigieron la dimisión del presidente, que tenía gran parecido con un humorista.